En esta entrega, te resumo los componentes que conforman un home studio. Así entenderás la filosofía de lo que se necesita para montar tu podcast a tope. No significa que necesites todo esto, ni que vaya explicar todo al detalle. De hecho, ya tengo el episodio 12, dedicado a la microfonía, y el 15 a la acústica, y seguiré ampliando.
Si bajas a la versión podcast de esta entrada, escucharás que ahora, viene la intro. Si te acabas de incorporar, no la pases. Es una lección magistral súper vitaminada: un texto excelente, una locución de primer nivel, música épica y efectos que ayudan a comprender mejor el mensaje.
1. El micrófono: Tu primera herramienta de trabajo
Este pequeñín es el alma de tu podcast. ¿Sabías que no necesitas gastar una fortuna para tener un micrófono de calidad? En el episodio 12 amplío mucho más sobre esto, pero te lo resumo aquí. El micrófono convierte el sonido de tu voz, lo que está en el aire, en electricidad, por eso se le llama transductor. Aquí, no hace falta que te gastes miles de euros para tener algo decente.
2. El previo: Lo que calienta la señal electrónica
Los micrófonos generan una señal muy bajita. Aquí entra el previo de micrófono, que es el que aclimata esa señal para que suene fuerte y clara. Lo más común en un setup profesional es que este previo venga integrado en la interfaz de sonido, que es lo que te voy a explicar a continuación.
3. Convertidor de analógico a digital: ¡Lo que convierte tu voz en 1s y 0s!
Antaño se grababa en analógico. Era bonito, pero con limitaciones de ruido y edición. Pero el ordenador no entiende una señal analógica directa. Por eso el convertidor de analógico a digital es necesario para tu máquina entienda el sonido. Lo más básico pero pro es una interfaz USB. Esta interfaz de sonido no solo convierte la señal, también integra el previo de micro. Además, la mayoría, incluyen convertidores AD (analógico a digital). También una salida para auriculares y para altavoces con su controles de volumen. Así, con una interfaz, no solo tienes un convertidor AD, sino una herramienta completa para todo el flujo de sonido.
¡Ojo!, que muchos micros USB ya vienen con previo y convertidor AD. Algunos incluso con DA y ampli de auriculares. Esto puede más económico y práctico para quienes empiezan. Si no tienes una interfaz dedicada, estos micros pueden ser suficientes para grabar con calidad. Y en caso de que no tengas ampli de auriculares en tu micrófono USB, ¡no te preocupes! Puedes usar la salida analógica de minijack de tu ordenador y también un adaptador de minijack a los altavoces. Así, puedes usar altavoces más comunes, tipo PC, sin necesidad de una interfaz de sonido avanzada. Como ves, la clave es saber cómo sacar el máximo provecho de lo que dispones.
4. El ordenador y el software de edición: El cerebro de tu estudio
El siguiente componente es tu ordenador. No te preocupes, no necesitas una máquina de última generación. Con un ordenador básico puedes hacer un podcast sin problemas. Eso sí, necesitas un buen software de edición. Mi recomendación es Pro Tools Intro, gratuito y el estándar de los estudios. Otros como Audacity o Reaper son buenas opciones, aunque para mí, son un poco ortopédicos. En el mundo del periodismo, muchos optan por Adobe Audition, que cuesta unos 25 al mes. Pero te soy sincero: no vale la pena pagar tanto por algo que no es necesario. Como opción gratuita, si tienes un Mac, GarageBand será perfecto para ti.
Aquí podrás editar, cortar lo que sobra y poner efectos y música. La edición es clave: si no les pones mimo, tu podcast puede sonar amateur. ¿Qué prefieres? ¿Un podcast bien producido o uno con errores?
5. Convertidor de digital a analógico: Ahora tienes que entender tú al ordenador
Este componente convierte los “unos” y “ceros” del ordenador de nuevo en algo que puedas escuchar. Es el último paso antes de que el sonido llegue a tus auriculares o altavoces.
6. Auriculares vs. altavoces: ¿Qué elegir para mezclar?
Una de las grandes preguntas que recibo es si usar auriculares o altavoces para mezclar. Mi consejo es que uses ambos, pero con enfoque. Los auriculares cerrados son muy útiles cuando grabas, porque no dejan escapar sonido, pero a la hora de mezclar, siempre es mejor usar altavoces de campo cercano. No hace falta gastarte una fortuna en altavoces. Por menos de 75 euros puedes encontrar altavoces autoamplificados de estudio de buena calidad. Y si te vale con los hifi PC, seguro que encuentras cosas por unos 30. Con los altavoces, vas a poder escuchar mejor las frecuencias graves y agudas, y hacer una mezcla mucho más equilibrada.
7. La acústica: Haz que tu estudio suene profesional
Esta parte suele asustar a los podcasters novatos: la acústica. Es posible que tu habitación no sea un estudio de grabación, pero no significa que no puedas mejorar el sonido. Puedes colocar cojines, alfombras y estanterías llenas de libros para mejorar la absorción y evitar que rebote en las paredes. Evita grabar cerca de ventanas o esquinas, porque esos lugares pueden crear ruidos extraños. Si no tienes mucho presupuesto, empieza por lo básico y mejora poco a poco. En el episodio 14, me adentro más en el tema de la acústica, así que puedes escucharlo si quieres saber más sobre cómo conseguir un sonido más profesional sin arruinarte.
